Para la masa
1 taza de harina
2 tazas de leche
3 huevos
sal
Para el relleno
1 tarros de queso mascarpone
1 bote de leche condensada
crema de leche

Bate todos los ingredientes de la masa hasta que no haya grumos.
Calienta unas gotas de aceite en el sartén y vierte un poco de la masa. Voltea la crepe para que se dore de ambos lados. Repite esto hasta que se te acabe la masa y deja enfriar las crepes.
Mezcla la leche condensada y el queso mascarpone.
Coloca una crepe y vierte un poco de la mezcla poniendo otra crepe encima. Repite esto hasta tener una torta del tamaño que quieras.
Rellena la tarta con lo que te guste, agrégale trozos de fruta fresca y disfruta de un delicioso postre.